¿De dónde sale ese color?

Hoy os vamos a contar otra de las actividades plásticas qué hemos realizado las últimas semanas.

Laura nos contó que su hermana le había regalado una cosa para clase. Ella sabía que estábamos estudiando los dinosaurios y por eso cuando lo vio, no dudó en comprarlo.

Cuando Laura giró el caballete y vimos estas cuatro láminas...

- ¡Mira! ¡Son dinosaurios!

- Hay un Triceratops.

- También veo un volcán.

- Hay un montón de arbustos.

- Para que coman los dinosaurios.

- Y un T-Rex.

- Parece un Alosaurio.

- Y ahí hay un Diplodocus.

- Igual es un Mamenquisaurio.

- Y también veo un Estegosaurio.

- Con el Diplodocus hay un Pterodáctilo.

- Pero tiene la cola muy larga.

- Mira el del T-Rex si que parece.

En ningún momento lo primero que observamos fue que fueran imágenes completamente negras.

Después, uno de nosotros dijo:

- Pues ahora lo tenemos que pintar.

- Si, porque Andrea nos lo ha regalado para que lo pintemos y lo pongamos en nuestro Rincón de Dinosaurios.

Y ahí comenzaron los problemas. Probamos con rotuladores (gordos, finos), con pinturas, con ceras, con pincel... pero con nada de nada se podía pintar.

- Igual es que son así... negros.

- Claro, se quemaron con el meteorito.

Y fue en ese momento, cuando Laura se dio cuenta que en el sobre donde venían las láminas había también un lápiz. Lo que ocurre es que cuando nos lo dejó para verlo de cerca, nos dimos cuenta que ese lápiz no tenía mina... ERA UN PALO DE MADERA.

Y uno de nosotros salió para intentar pintar. Y....

- ¡Magia! ¡Ya lo pinta!

- Sí, mira lo pinta verde.

- ¿Y como cambia de color?

- Seguro que hay más palos.

Pero no, no había más palos. Así que probamos a pintar en otra parte y...

- ¡Súper Magia! ¡Es un palo que tiene todos los colores!

Y fuimos probando todos como iban quedando los dinosaurios coloreados.

Hasta que alguien probó a rascar con la uña y...

- Lo que pasa es que los colores están debajo y al pintar con el palo se va el negro.

Habíamos descubierto el "truco".

Y como Laura ya sabía que era algo que nos iba a gustar mucho, nos explicó que ese "truco" lo podíamos crear nosotros también. Y nos mostró un ejemplo.

Nos entregó unas hojas de papel blanco y nos dijo que teníamos que pintar franjas de colores. Las podíamos hacer verticales, horizontales, diagonales... pero tenían que ser de colorines, teníamos que cubrir muy bien todas las zonas y no podían ser muy muy finitas, pero tampoco muy anchas.

Cuando las tuviéramos hechas lo cubriríamos todo de negro.

- ¡Pero entonces no se ve nada!

- Luego pintaremos con el lápiz de magia y se verá.

Efectivamente, tras cubrir todo de negro con ayuda de un palito de madera de los "pincho morrudos" como uno de nosotros lo llamó, podríamos hacer los dibujos que quisiéramos.

Alguno de nosotros aún fue más allá y le preguntó a la profe una vez que había hecho el dibujo:

- ¿Y ahora cómo lo borro? Es que quiero dibujar otra cosa.

Fácil, volvemos a pintar de negro encima y ya puedo empezar de nuevo.

Nos lo pasamos fenomenal dibujando y escribiendo sobre nuestro papel negro, porque cuando pasábamos el palito de madera aparecían los colorines.

Después, pegamos las hojas en un folio de color y las decoramos con gomets.

Cómo veis quedaron preciosas.

Os animamos a que sigáis disfrutando de esta técnica en casa y  que si os apetece nos mandéis fotos para enseñarlas a nuestros compañeros.